Estado
Situación:
Carretera A-319 Cazorla -Peal de Becerro s/n. Cazorla. Jaén
Cliente:
Servicio Andaluz de Salud. Junta de Andalucía
Contratista:
Dragados S.A.
Superficie construida:
9.600 m
2
Presupuesto:
17.800.000 €
Proyecto - Obra
2009-2018
Concurso
Arquitecto
Arquitectos
Arquitectura
Ignacio Laguillo, Harald Schönegger, Luis Ybarra | Eddea
Co-autor Proyecto
Co-autores de Proyecto
Arquitecto Asociado
Arquitectos Asociados
Arquitecto Colaborador:
Arquitectos Locales
Arquitectura Técnica:
Roberto Alés junto con Eladio Serrano | Eddea
Equipo:
Felipe Clemente, Diego Cabezas, Valentina Daría, Margarita Díaz, Javier Estévez, Blanca Farrerons, Jaime Fernández, Francisco Losada, Paco Marqués, Antonio Raso, José Carlos Oliva, Ignacio Orellana, Carlos Paneque, Isabel María Redondo, Javier Salvador, Salvador Sánchez, José María Sánchez-Rey, Carlos Serrano, Ruben Silva e Ignacio Olivares
Colaborador
Colaboradores
Estructura:
Enrique Cabrera - Tedeco
Instalaciones:
Miguel Sibón Roldán
Paisajismo:
Jaime García
Mobiliario
Maqueta
Fotografía:
Fernando Alda
Fernando Alda
Las infraestructuras hospitalarias se caracterizan por dejar un fuerte impacto en el entorno. En una posición privilegiada ante el paisaje, la arquitectura propuso identificar la futura relación del paciente con el entorno como primera medida terapéutica a recibir. La respuesta es fundamentalmente el resultado equilibrado de dos decisiones. Una implantación a través de una escala y materialidad adecuada y un reconocimiento de unidad, sin deseo de notoriedad en la distancia.
Con una disposición en tres plantas, se accede a través de la intermedia, de mayor uso público. En este nivel se segregan los accesos y una cadencia de espacios, plazas, patios, se orientan de forma óptima en función de sus necesidades. La planta superior limita su programa al de Cirugía y Hospitalización y el nivel enterrado se destina principalmente a zonas restringidas. Los espacios exteriores alterados por las necesarias contenciones y accesos, recuperarán con el tiempo un aspecto acorde con el entorno, disponiendo coníferas, arbustos y plantas forestales, que lo mimetizarán aún más con la memoria del lugar.
La provincia de Jaén, tierra de alfares también, reconoce en la cerámica un material vernáculo, aunque empleado en este caso con técnicas y exigencias actuales, como fachada ventilada. Las juntas de construcción aparecen magnificadas en apariencia, número y tamaño, para componer junto a la paleta de huecos una composición en el que el orden o el desorden muestran su aspecto más ambiguo. En la materialidad del interior, la neutralidad de los paramentos higiénicos blancos conviven con la piedra natural y las transparencias de los vidrios y lucernarios.